Aprovechando mis días de descanso hoy he ido con mi mujer y mi hijo a pasear por el mercado de Sineu. Como todo en esta vida, el tiempo, las costumbres, las necesidades, las leyes, han hecho cambiar mucho este mercado que décadas atrás era uno de los más importantes de la isla en cuanto a mercado ganadero se refiere pero poco a poco esa actividad ha ido disminuyendo de tal modo que hoy en día es meramente testimonial con algunas razas de animales domésticos: ovejas, cabras, cerdos, asnos, perros, gallos, palomas... pero ya no existe ese negocio de mercadeo entre payeses de la comarca y del resto de la isla que a primera hora de cada miércoles del año dejaban sus labores del campo por unas horas para ir a su cita obligada.
Hoy el mercado de Sineu se vende al turismo y son cientos los extranjeros y curiosos que lo visitamos con la excusa de pasear por las calles de este pueblo de interior lleno de vida un día a la semana y, después acabar en la terraza de un bar o en un típico celler para degustar su gastronomía.
Esto es lo que mi ojo ha captado a través de mi cámara fotográfica en esta visita de hoy 24 de julio de 2013 y en una anterior del pasado 12 de junio:
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